Salvador Ferrandis, presidente de la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico "Valencia tiene que ser la playa y el puerto del centro de España" “Estuve en la fundación de la asociación. Y tras un primer mandato, pasado un tiempo, he vuelto. Cuando empezamos el centro tenía distintas asociaciones divididas por zonas. Las reunimos y hemos podido desarrollar muchas actividades y así ofrecer ventajas a los clientes”. ¿La unión hace la fuerza? Habían ganas de hacer cosas y hemos conseguido atender a las necesidades de los diferentes sectores de los asociados. Cuando nos unimos, nadie perdió representación y se hizo de manera agradable. ¿Cómo se compite contra las grandes superficies? Nuestra lucha es la vida del centro. Lucir escaparates, ajustar precios y realizar acciones comerciales. Por ejemplo, tenemos la tarjeta de Shopping Valencia Centre. Esto permite la acumulación de puntos y utilizarlo en cualquier comercio. Pero todavía hay cosas que mejorar. ¿Cuáles son los próximos objetivos de la asociación? Facilitar el aparcamiento, rebajar el coste de éste y mejorar el servicio. Ya se están haciendo cosas pero todavía falta. Desde la asociación estamos muy contentos con la ampliación de aparcamiento para las bicicletas, que junto al transporte público, son el futuro. Estamos negociando que se pueda utilizar en determinadas horas las paradas de taxis para que se pueda hacer un estacionamiento rápido. También conseguir bonos para abaratar los parkings. También habla de mejorar el servicio, ¿de qué manera? Partiendo de que hay un buen servicio, sí es cierto que quizá falta formación en la atención al público. El tema de los idiomas es una asignatura pendiente. También un buen servicio es cuidar el producto y creo que no se puede ofrecer como paella valenciana algunos platos congelados. Tener la ciudad más limpia. En resumen, un buen servicio es que el cliente obtenga más de lo que esperaba obtener. ¿Cuáles son los enemigos del pequeño comercio? El otro día escuché que los bancos se planteaban abrir por las tardes para además de ofrecer el dinero, proporcionar el producto al cliente. Por suerte, creo que el tema no ha salido adelante, pero eso es una amenaza. También la venta online y, por supuesto, los centros comerciales. Además, para el pequeño comercio, acometer reformas o cualquier innovación, es un trozo del presupuesto muy alto. Otro gran problema es el “top manta”. Es cierto que detrás de todo eso hay un gran drama humano, pero mientras el comerciante paga impuestos, ofrece garantías y cumple la legislación, en la puerta de su tienda tiene productos ilegales y además, mejor expuestos. A nosotros nos penalizan si salimos a las calles sin permisos. Sin embargo, que haya un centro histórico con vida interesa a todos, ¿no? Una ciudad sin comercio es una ciudad muerta. Es lógico que se busque la facilidad, por eso hay que ofrecerla al cliente. Nosotros tenemos hechas unas rutas, que además de los comercios, incluye a la ciudad, su ocio y su actividad cultural. A la Administración también le interesa que a nosotros nos vaya bien pero falta apoyo. Urge ya un carril bici, aparcamientos más económicos. También cuidar la estética de la ciudad. Hace poco viajamos a Berlín para ver cómo presentan allí los mercados artesanales, son una delicia. Se cuida el producto que se ofrece, cómo se ofrece. Aquí los mercaditos se han quedado en meros bazares. ¿Las fortalezas de la marca Valencia? Ha evolucionado exponencialmente. Se ha pasado de una ciudad sin nada atractivo a una que se ha dado a conocer. Además, la llegada de cruceros ha aumentado la presencia del turismo. Es un público que gasta dinero pero hay que apostar por el producto típico valenciano. Valencia tiene que ser la playa y el puerto del centro de España, porque si quieren pasar el día en la playa, irán por la tarde y por la noche a la ciudad. Por último, a la marca Valencia le pediría más actividad cultural y festiva. Por ejemplo, la oferta teatral está muy baja. Hacen falta sitios donde poder ir. ¿Cómo está la PYME valenciana? La veo bien, tiene un número importante de afiliación. Es cierto que necesita apoyo de las consellerias. Las instituciones empresariales están trabajando mucho pero se necesita legislación a favor. Se está trabajando mucho pero de qué sirve si luego desde la Unión Europea permite que entren productos sin pagar tasas. O por ejemplo, en la agricultura, hay robos de circuito eléctrico o de los productos. Si no se persigue, por mucho que trabajes… Medidas concretas para salir de la crisis Quizá un cambio de gobierno sería un aliciente, facilitar el crédito, reducir el tiempo de pago de las administraciones. Conseguir importar optimismo y movimiento a la gente.