Mientras Europa lidia con su inminente crisis energética, los residentes en España se vuelcan en las energías renovables para satisfacer sus necesidades de electricidad. En el último año las solicitudes para instalar paneles solares han aumentado un 213%.
El cambio se produce debido al continuo aumento en el precio de la electricidad y gracias a que el llamado “impuesto al sol” será eliminado sobre la energía solar producida en el país, ya que la nueva legislación, entre otras mejoras, permite a los españoles crear las llamadas “comunidades energéticas” para generar energía a través de sus instalaciones colectivas.
El gobierno de España, uno de los mayores mercados europeos de energía solar, es uno de los que lidera la iniciativa de ofrecer varios planes de inversión para acelerar el despliegue de la capacidad de energía renovable.
Entre los incentivos, España ha aprobado 450 millones de euros en subvenciones para estimular la inversión en nuevos acuerdos verdes y sistemas de baterías. La financiación forma parte de su plan de recuperación y resiliencia aprobado por la Comisión Europea para estimular la recuperación económica tras la pandemia del COVID-19.
El presupuesto español asigna el 40% de su financiación a medidas que apoyan los objetivos climáticos, como el despliegue de tecnologías para las energías renovables y el hidrógeno verde, junto con la movilidad sostenible, la eficiencia energética de los edificios y la descarbonización de la industria.
España se sitúa ahora, por detrás de Holanda y Alemania, como el tercer país con mayor índice de electricidad procedente de la energía solar. Y algunos afirman que empiezan a notar los beneficios de la energía solar en sus carteras.
Y este aumento no se limita a España. La energía solar también está en auge en el conjunto del bloque. Entre mayo y agosto, el 12% de su electricidad procedía de la energía solar. En 2020, esa cifra era de sólo el 5,2%. Y este porcentaje no parará de crecer, debido a la inteligente idea de subvencionar esta tecnología para intentar paliar el cambio climático.
Las empresas se han puesto las pilas y se han puesto manos a la obra para poder aprovechar al máximo estas subvenciones. Por ejemplo, IDES, una empresa Valenciana con años de experiencia en el sector, se encarga de ayudar al cliente a realizar las gestiones a la hora de solicitar las ayudas para la instalación de placas solares.
IDES ofrece la planificación, instalación y mantenimiento de todo tipo de soluciones solares para autoconsumo tanto para empresas, comunidades de vecinos, zonas aisladas y clientes particulares. Si quieres sacarle el máximo partido a estas ayudas o necesitas un servicio profesional para tu instalación fotovoltaica, en IDES también podrás contratar tu servicio dedicado a la producción, distribución y comercialización de energía.
La energía solar y otras renovables aún no pueden sustituir completamente a los combustibles fósiles, pero su uso más frecuente reduciría drásticamente la cantidad de carbono en el aire. Adoptar la energía solar fotovoltaica de forma más generalizada no sólo reduciría la amenaza del cambio climático, sino que podría disminuir las enfermedades relacionadas con la contaminación, como el asma, el enfisema y el cáncer de pulmón, y contribuiría a la lluvia ácida. También reduciría el estrés relacionado con la contaminación en plantas y animales.
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